Para disfrutar de buena salud es vital tener un sueño reparador. Cuando diseñamos nuestro dormitorio lógicamente tenemos en cuenta todo lo fundamental para conseguir ese descanso tan necesario.
Es posible que hayas tenido en cuenta todas las recomendaciones decorativas o de tendencias y que se encuentre todo integrado en tu dormitorio. Y aún así no descansas y lo peor…te sientes: descontent@, impaciente, dependiente, celos@, incluso hasta que te levantas ralentizad@.
Si tienes alguno (o varios) de los síntomas enumerados, es el momento de revisar con atención la decoración del dormitorio y ver que nos sobra o falta.
Hoy hablaremos de lo que es posible que te falte para armonizar esa atmósfera del dormitorio, un espejo.
6 ocasiones en las que colocar un espejo en el dormitorio.
1.- Para conseguir más luz. Si se sitúa un espejo al lado de la ventana refleja y reparte la luz que entra en el interior.
2.- Ampliar el espacio. Los espejos crea sensación de profundidad.
3.- Colocar un espejo en aquellas habitaciones orientadas al norte. Al potenciar la luz suavizan la energía fría que se recibe de esta dirección.
4.- Un espejo es un complemento decorativo de excepción para representar el Elemento Agua (de la misma forma que el cristal, vidrio o cualquier tipo de cuadro con cristal).
5.- Si en la habitación necesitas incrementar varias energías distintas, por ejemplo: elemento agua, elemento fuego, madera o tierra. Utiliza además del espejo; formas, material y colores. Se puede representar en un sólo complemento dos elementos o más a la vez.
6.- Si tu estado de ánimo es: depresivo, pesimista, impaciente, descontento… ¡Es el momento espejo en tu dormitorio no lo dudes.
Nuestro descanso y sueño requiere una energía ordenada y apacible por eso es muy importante tener en cuenta “que refleja el espejo”.